Nunca había visto tantos monumentos dedicados a la paz. Yendo hacia las oficinas del Servicio Jesuita a Refugiados (SJR) en Bangui, la capital de la República Centroafricana, pasamos por una rotonda coronada por una paloma gigante . También nos encontramos con un pequeño monumento de corte neoclásico anunciando una paz duradera. Los grandes paneles informativos sobre la inversión financiera de Naciones Unidas y de la Unión Europea exponen un compromiso permanente con la reconciliación y la convivencia pacífica.
La violencia como norma y el misterio de la paz
